La voz humana es un manantial vivo llena de energía sagrada y poder creador para nombrar y emitir sonidos y palabras a todo lo existente en la naturaleza
DEL GRITO A LA PALABRA
“LA LENGUA VERDE ”
Marcado
a fuego en los genes de su ADN estaba la necesidad imperiosa del hombre de
comunicarse con todos los seres vivos de la creación, necesidad que creó el
órgano de la VOZ
como soporte del lenguaje, dos hechos primordiales para el ser humano al
convertirse por ello en portador del verbo y un ser superior en la escala evolutiva
del planeta Tierra.
Imaginemos
a los primeros humanos pasando del puro grito gutural soplado desde su aparato
fonador en los bosques y en la resonancia espectral de las cuevas intentando comunicarse
con un lenguaje puro, primordial, vivo y creador con sus semejantes para dar salida a toda la
energía emocional que bullía en su interior como un volcán a punto de expulsar
de si mismo todo el fuego expresivo que necesitaba salir de él para comunicar
placer y dolor, hambre, sexo, amor, guerra y paz.
Así
nació el primer lenguaje vivo y dotado de poder llamado por los primeros
iniciados en los misterios; sacerdotes, magos y chamanes de las diferentes
tradiciones culturales de la madre Tierra: “La lengua Verde” o “Lengua
de los pájaros”; claves iniciáticas del verbo creador que se perdieron por
el vértigo espectral de los siglos, pero que permanecieron ocultas en las
Escuelas de Misterios desde el
continente sumergido de la
Atlántida y sus hijos e hijas desperdigados por las tierras
de Sumeria, Egipto, India, China, Tíbet, Alejandría, Islas Griegas, Celtiberia,
Germania, Bretaña, Países bárbaros del Norte y por el nuevo mundo llamado America.
¡CONECTA CON TU VOZ
Y
LA PALABRA
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